martes, diciembre 16, 2014

Propiedad Intelectua, tema de vital importancia para artesanos reunidos en Expoartesanías

La propiedad intelectual no es un campo exclusivo de académicos y escritores reconocidos, antes bien,  es un tema de vital importancia dentro de cualquier proceso creativo. Los signos distintivos otorgados a los artesanos les brindan la posibilidad de diferenciarse en el mercado y de defenderse de la piratería y en caso tal, iniciar procesos legales que se presenten cuando se hagan copias o se aprovechen de la reputación de sus productos.
Es por esto que este miércoles 17 de diciembre a las 10:30 am  en el  stand del Proyecto de “Propiedad Intelectual y Artesanías” de Expoartesanías (Corferias), se renovará el Convenio interadministrativo entre  Artesanías de Colombia y la  Superintendencia de Industria y Comercio- SIC, cuyo fin principal es crear un mecanismo conjunto de apoyo para incentivar el registro de los signos distintivos colectivos e individuales en el sector artesanal colombiano y  mantener tasas  especiales a favor de los artesanos  en cuanto a trámites marcarios.
En el marco del convenio durante el año 2013 y 2014 se logró tramitar más de 400 marcas comerciales y 10 Colectivas  de artesanos en todo el país. Además, se realizaron cuatro eventos  académicos internacionales en los que participaron artesanos y expertos en propiedad intelectual y artesanías.
El nuevo convenio que se  suscribirá, busca  trabajar de manera conjunta con el propósito de lograr que los artesanos den uso efectivo de las denominaciones de origen (D.O) artesanales en el mercado, de manera que se establezcan mecanismos idóneos para lograr la delegación de autorización de uso a terceras entidades o personas jurídicas organizadas.
A la fecha Artesanías de Colombia ha logrado que 57 comunidades  artesanales  adquieran conocimiento sobre los derechos de  propiedad intelectual y su potencial aplicado a la artesanía. Productos emblemáticos como la Tejeduría Wayuú, la Cestería de Guacamayas y la Cerámica de Ráquira ya obtuvieron sus Denominaciones de Origen,  haciendo de Colombia el primer país en América Latina con el mayor número de denominaciones de origen en el sector artesanal. Por otra parte, El Sombrero Vueltiao, La Cerámica Negra  de La Chamba, y  La Filigrana de Mompox,  a través de sus organizaciones,  han logrado hacerse  titulares de  treinta y dos  marcas colectivas.